martes, 5 de junio de 2007

Carta al paleto (que no al mago)

Hola paleto...sí, sí, es a ti, no mires a otro lado...¿te parece bonito ir por ahí insultando a sectores enteros de profesionales simplemente porque defienden sus derechos con el único instrumento legal para ello como es la huelga?.



Según tú los huelguistas son unos gandules, sobre todo los que tienen que ver con trabajos "guapos", como tú mismo y tu gremio afirmais. Aclarar que tu gremio suele ser el de los desocupados voluntarios y el de los superchachis peones de albañil. Mira que conozco yo gente de la construcción de muchos años atrás y que son grandes personas pero me dá que tú, el paleto sin remedio, no eres de ese grupo.



A ver, para no liarte que seguro que a duras penas podrás leer dos líneas seguidas y menos entenderlas. ¿Sabías a qué nos dedicábamos los huelguistas cuando tú con tu banda de delincuentes os dedicábais a trapichear y fumar porros de segunda mano?.



¿Sabes por qué todos los que son como tú tienen un "bemeta" de quinta mano pero que de todas formas pone BMW?. ¿Sabes por qué tú intentas ir a la moda aunque lo que te pongas te quede como una patada y "los otros" vamos como personas normales y somos sin nada especial mucho más elegantes?



Pues porque este es un pais de paletos. Tu reino. Y cuando, como te decía antes, te dedicabas a vagabundear por ahí con lo peor de la calle "los otros" estábamos estudiando, intentando formarnos como personas y de paso darles una alegría a nuestros padres.



Nos gastábamos los ahorros en ser cada vez mejores, cada vez mejor educados, subir escalones en la calidad humana y muchos trabajábamos y estudiábamos al mismo tiempo.



Sin embargo el changa, ¿a dónde iba?. A mezclar cemento, machango, que por lo visto es fácil porque personal para eso se encuentra a la patada.



Vamos a dejarlo aquí para no cansar a la gente, pero que sepas que cuando le grites, o berrees más bien, a alguien aquello de "¡Pónganse a trabajar, gandules!" igual te reponden "¡Ponte tú a estudiar, paleto!".



Y hablando de magos, con los que muchos te confunden, ellos por lo menos saben cosas de la vida, tú ni eso.





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