miércoles, 28 de febrero de 2007

Prohibido enfermar

Pues eso, de repente aparece la dichosa gripe.



Te deja planchado, no puedes ir a trabajar porque entre otras cosas coges más frio del recomendado aparte de que conducurías peor que yendo borracho. Todo ello, y sobre todo porque estás peor que si te dicen que casi te toca la lotería, hace que veas como solución más lógica el ir al médico. Con lo del médico me refiero a un individuo/a de blanco que está en un despacho en un sitio denominado Centro de Salud aún no sé por qué. Allí se reune lo mejor de lo mejor de las enfermedades más contagiosas y tal...



Son las 09:00h. y digo "no creo que sea ni temprano ni tarde...probemos a ver". A todas éstas voy que me caigo, como digo, ni borracho me tambaleo tanto. Llego al citado sitio obviamente no tengo cita porque si yo supiera cuándo me voy a poner enfermo nunca me pondría...¿no?. Pues me dan un papelito y a esperar. Pasa 1 hora, 2, 3 y hasta 4. Y entonces cuando ya sólo quedo yo y unos señores que acababan de llegar me dice alguien que sale por la puerta del despacho también llamado consulta...¿te toca a ti?, y yo, pues debe ser, a no ser que quiera que llame a todos los de la otra consulta para no dejarme entrar...



Ya a estas alturas la fiebre ha ido remitiendo, y es que 4 horas son 4 horas, da tiempo hasta para morirse un par de veces. Total, que la medica me dice, tómate esto y esto otro cada 8 horas y no cojas frio. Y yo le digo, tranquila, mañana cuando salga a trabajar a las 05:30h. le digo a San Pedro que cierre las ventanas, que no sea c... que me pone malo.



Parece que la solución es hacer una maleta como si me fuera de viaje con ropa de repuesto ya que al estar en la calle desde la madrugada, que es de noche a todos los efectos, y como termino cerca de las 16:00h. y a esas horas muchas veces hace calor con sol incluido pues nada, a cambiarse. O sea, que me voy de vacaciones al trabajo....porque lo de enfermarse poco a poco se prohibirá a base de que te gasten putadas por todos lados y la inexistente colaboración de tus dueños, o sea, de los del sitio donde curras.



Ah, se me olvidaba que la tía (la médica) me dice "¿te hago un justificante?" (para el trabajo, claro), y yo le digo, pues para las 4 horas que me mandé ahí afuera muy chungo ya podía ofrecerme un par de jornadas completas...pero bueno, menos es nada.


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